SONETO A MARICARMEN
Cuando brota
la luz del nuevo día
tu nombre
invoco apasionado y triste
y cuando el
cielo de sombras se viste,
aún te llama
exaltada el alma mía.
Tú eres el
tiempo que mis horas guía,
tú eres la
idea que a mi mente asiste,
porque en ti
se concentra cuanto existe,
mi amor, mi
esperanza, mi poesía.
No hay nada
que igualar pueda tu acento
cuanto tu
amor me cantas y deliras,
revelando la
fe de tu contento.
Tiemblo a tu
voz y tiemblo si me miras,
y quisiera
exhalar mi último aliento
abrasado en
el aire que respiras.
Luis Varela
Uno se puede quedar en esos bancos vacios que estan detrás de tus versos y leerte dejando la voluntad en libertad, porque hay sonetos que tienen esa potestad. Un abrazuco
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tu generoso comentario para con mi soneto, Ester. Uno hace lo que puede, como decía Lope "amor dicta, yo escribo. Un abrazo.
EliminarEl amor que todo lo embellece y lo engrandece. Así tu soneto, Gran Poeta. Excelso, como lo es tu sentimiento.
ResponderEliminarSabes que siempre es un lujo leerte, Luis. Siempre.
Mil besitos que te lleguen con cariño.
Gracias mil, Auroratris. Lamento tener que discutir contigo, pero aquí el único lujo que hay es tu presencia.
EliminarBesillos mil con todo mi cariño, Poetisa Grande.